martes, 14 de mayo de 2013

De acá y de allá


Acá esta presente eso… que define no porque sea sino porque crea, como una imagen que se desprende de la realidad; como -allá- al principio, como -acá- ahora; en la génesis de todas las cosas, en todas las casas, en todas la rosas (que saben distinto, que huelen a nuevas, que miran con cariño).
Allá la cosa más pesa, ya esta hecha. 
Acá se va el tiempo sin por qué, vale para otra cosa. 
Mosquitos, muchos mosquitos, que alientan al desquicio.
Mucho juicio. Me interesa, me importa. Soy uno de ellos, de aquellos.
O sea, el problema: tan allá como acá.
Me miente la mente para sobrevivir, y me acerca el corazón para sentir. La ecuación es la misma. Después de la vuelta, lo mismo da...
El lugar no nos distingue. Extranjero de raíz, hermanado por historia. 
Se conforman los sentidos de una manera peculiar, con el gusto por lo otro y el anhelo de lo ajeno, combinación difícil que me hace mucho menos; copando de abundantes palabras el prejuicio de aquellos que me juzguen, seguros de saber la diferencia entre lo que se vive y se piensa, creyendo que el olor de las rosas es el mismo acá, allá y en los sueños.

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